sábado, 26 de febrero de 2011

127 Horas (127 Hours)

Año: 2010
Género: Drama.
País: Estados Unidos - Reino Unido.
Duración: 94 minutos.
Dirección: Danny Boyle.
Intérpretes: James Franco, Kate Mara, Amber Tamblyn, Treat Williams, Clémence Poésy, Lizzy Kaplan.

"127 horas es la verdadera historia del alpinista Aron Ralston, una extraordinaria aventura de supervivencia donde el protagonista debe salvarse a sí mismo después de que una piedra se estrellase contra su brazo atrapándole en un cañón aislado de Utah. Durante los próximos cinco días Ralston examina su vida y sobrevive a las adversidades para descubrir finalmente que tiene el coraje y los medios suficientes para liberarse a sí mismo. A través de su recorrido, Aron recuerda amigos, amantes a su familia, y a las dos jóvenes que conoció antes de su accidente. ¿Serán ellas las dos últimas personas que conocerá en su vida?"

Poco y nada puede reprochársele a Danny Boyle. El tipo es técnicamente un camaleón, y toda película que hace se diferencia enormemente una de la otra: hizo drama, comedia, acción, suspenso, ciencia ficción, terror, todo. Es un hombre orquesta y (casi) todos sus trabajos tienen una calidad impresionante. Es uno de los directores más versátiles que conozco. Ahora, admito que por razones inexplables no vi Slumdog Millionaire, aunque la propuesta me parecía de lejos un poco sobrevalorada.

 Con 127 Horas, Danny me voló la cabeza. Sencillamente, es un viaje de ida a través de una historia potentísima de hasta a dónde llegan las fuerzas del ser humano con tal de sobrevivir, el espíritu de la supervivencia expuesto a las condiciones más nocivas.

Valiéndose del carismático James Franco al frente de toda su película, el director nos arrastra en el viaje del intrépido Aron Ralston, un montañista temerario en su viaje exploratorio en el Gran cañon queda atrapado por una gran roca. Hasta el momento en el que estalla toda la crisis, lo mejor que hace Boyle es construir el personaje de Aron Ralston: es charlatán, divertido, gracioso, activo, extrovertido, y el encuentro con dos montañistas, Kristi y Megan es un gran prólogo... hasta que llega la tragedia, y con ella, los títulos de crédito, nunca mejor colocados, y de un modo totalmente significativo.

A quince minutos de comenzar la película, es ahora en donde 127 Horas se convierte en el show de James Franco; hasta hoy, nunca había tenido en cuenta todo el potencial de James, y acá demuestra que no es sólo una cara bonita y la nominación al Oscar bien está justificada. Es sorprendente todas las facetas de Franco, cómo genera empatía con el espectador, así con cada minuto que pasa, la situación es desesperante a más no poder, y sólo con él al frente es el principal aliciente de esta propuesta. Y con el final, admito que me lloré la vida - la combinación de todos los elementos y momentos que venía presentando el film me dieron justo en el lugar indicado.

Me sería fatal olvidarme de los otros personajes, que aparecen durante el viaje de Aron (en este caso, Kate Mara y Amber Tamblyn, ambas adorables) y en los flashbacks y alucinaciones/remembranzas de Aron: la hermosa Clemence Poésy (yep, la Fleur Delacour de Harry Potter), la pequeña participación de Lizzy Kaplan como la hermana de Aron, o el eterno secundario de Treat Williams como el padre de Aron. Buen elenco.

Algo de lo que me di cuenta mirando 127 Horas es la incesante y velocísima dirección de Danny; este señor es fanático de jugar con los ángulos y le saca tanto pero tanto jugo a las locaciones que en ningún momento llega a aburrirte con su dirección. Es rápida, meticulosa al extremo y muy atractiva. Algo que le funciona a su favor es la edición de Jon Harris (magnífico editor, pésimo director - su primera y única película al momento es la fea The Descent: Part II) con cortes aquí y allá, muy MTV. Exhorbitante el trabajo en conjunto.

 El otro tema es la música. Odié a A.R. Rahman con la música de Slumdog Millionaire y el feo tema 'Jai Ho', que considero horrible y encima nos lo machacaron una y otra vez; acá, me encantó la música que hizo! Muy penetrante, incipiente, y con un soundtrack agregado muy interesante y, en ciertos momentos, irónico. También, el tema 'If I rise' con Dido te llega al corazón.

127 Horas es una gran historia de vida y superación, con la duración justa para no aburrir, una actuación memorable de parte de James Franco y una dirección elogiable de Danny Boyle. El blanco perfecto para los Oscars este año.


Calificación: A-

1 comentario:

Florencia Orsetti dijo...

Las tomas de la película son un 10/10. No puede ser tan perfecta en ese aspecto. ¡Qué planos, qué tomas!
Por lo demás, es bastante buena, pero no es sobresaliente.