lunes, 12 de marzo de 2012

Projecto X: Fiesta fuera de control (Proyect X)

 Año: 2012
Género: Comedia.
País: Estados Unidos.
Duración: 88 minutos.
Dirección: Nima Nourizadeh.
Intérpretes: Thomas Mann, Oliver Cooper, Jonathan Daniel Brown, Dax Flame, Kirby Bliss Blanton, Alexis Knapp, Brady Hender, Nick Nervies, Milles Teller, Martin Klebba.

"Tres amigos cursan el último año de secundaria mientras intentan hacerse populares para salir de su anonimato escolar. Su idea es sencillamente inocente: 'hagamos una fiesta a la que nadie olvidará'…pero nada los podrá preparar para esta fiesta. La noticia corre rápido a medida que se desvanecen los sueños, se ensucian las reputaciones y surgen las leyendas."

Agradezco nuevamente a Cinescondite por la oportunidad de ver la película en función de prensa.

Seguro que durante los últimos años de secundaria, uno pensó que esa época era el tiempo de gloria para salir de fiesta, emborracharse y pasar las mejores noches de sus vidas; ni lerdo ni perezoso, Todd Phillips (director de películas descontroladas como Old School, Due Date y las recientísimas y ultrapopulares Hangover) vio una oportunidad para llevar el descontrol de las despedidas de solteros de sus últimas películas hacia un territorio más juvenil, y el resultado es Project X, una película bastante polarizante en el sentido de que está dirigida a un sector demográfico específico que de seguro disfrutará con fervor esta fiesta alocada, y el resto no encontrará quórum al verla. 
 
Al comenzar la historia, un trío de perdedores (típicos arquetipos de este tipo de comedias) planean una noche fuera de serie para ganarse un nombre por sí mismos y terminar la secundaria con un sacudón de popularidad; ellos son Thomas, el agasajado, un chico bien común, su extralimitado amigo Costa y JB, el gordo tonto del grupo. No hay nada más raro en la historia, sino que sigue los mismos patrones de las nuevas comedias de adolescentes como Superbad y demases: los perdedores terminan conquistando la noche, convirtiéndose en leyendas y superando todo obstáculo imaginable. Donde cambia el enfoque es en el guión de la historia y por cómo encara la narración la película.

El actor devenido en guionista Michael Bacall (quien firmó una de mis favoritas de todos los tiempos, Scott Pilgrim  vs. The World) junto con el novato Matt Drake rellenan la trama con personajes básicos pero con diálogos frescos y llenos de mala leche, típico comportamiento de adolescentes, y con muchas situaciones que se van espiralando fuera de control para culminar en el caos máximo; por el otro lado, el director Nima Nourizadeh debuta con esta película, que opta por tomar el interesante punto de vista 'cámara en mano' para contar esta desopilante historia bien de cerca, mediante un chico más que filma toda la odisea y a través de los teléfonos que tienen varios protagonistas, creando varios puntos de vista que realmente lo hacen sentir a uno dentro de esta celebración del mal comportamiento.

El trio de protagonistas, meramente desconocidos, hacen un buen trabajo con una química palpable entre ellos, aunque el amigo gordo, Jonathan Daniel Brown sirva de punching ball verbal y apenas sobresalga como personaje, y el agregado de Martin Klebba este completamente de más como el enano desquiciado.

 Si gustaron de The Hangover y su secuela, no por algo el director de las mencionadas es productor acá: alcohol, drogas, sexo, no falta nada en este combo de entretenimiento asegurado que presenta Proyecto X. Mayores de 35, abstenerse, esta no es su clase de fiesta...


Calificación: B

1 comentario:

Anónimo dijo...

que comentario mas pelotudo, ahora resulta que fiestas es incendiar casas, hacer orgias infantiles, molestar a los vecinos, enfrentarse a la policia, que pelotudo el que comenta. Por si no sabian esta pelicula justamente se hace para mostrar lo que NO HAY QUE HACER, peros los imbicilitos consideran esto una hazaña y la repiten, manga de inutiles, perdedores, futuros delincuentes los que quieren copiar lo que hacen lo que hacen en la pelicula