Si leemos entre líneas, 'La Historia de Lisey' se refleja en el prolongado y feliz matrimonio de King con su esposa Tabitha y viceversa, ya que la novela fue concebida a raíz de la preocupación del autor si en determinado momento muriera y quedara su mujer a solas, tratando de ordenar los restos de la vida de su esposo escritor.
Estas son las bases para la novela más personal hasta la fecha que haya leído de Stephen King, en donde deja de lado el horror (que no lo fantástico) para encarar una historia dramática sobre lo que queda después de la muerte de un ser amado.
Lisey ha quedado sola. Hace dos años que su marido ha fallecido y todavía no puede hacerse la idea de que se ha ido. Agobiada por su responsabilidad familiar para con una de sus 4 hermanas, Amanda, que tiene tendencias suicidas, y el acecho de los Inkunks (como ella le llama a todos aquellos estudiosos que buscan escritos póstumos de un autor), la historia se mueve entre el presente y el pasado, investigando las fuentes de la relación de Lisey con Scott, relatando TODOS los detalles que lo han hecho a él un escritor tan conflictuado, retrotraído y un poco loco (¿alguien dijo King?).
Es también una alegoría al drama familiar, en el que cada familia de vez en cuando tiene sus momentos de locura (retrataos aquí con una perversidad absoluta), a las relaciones dentro del seno familiar, y también una historia de amor más allá de cualquier barrera. La singularidad de la novela racida en el hecho de que existe un lugar, Boo'ya Moon, un lugar imaginario al cual el autor y todos aquellos conectados a él pueden acudir, un lugar hermoso de día y tremendamente peligroso de noche, por el cual rondan todo tipo de criaturas nocturnas.
Está claro que una novela de Stephen King sin un poco de fantasía no sería novela suya, y este detalle tan particular es lo que la ahce totalmente diferente a otras novelas suyas; la prosa también es extremadamente personal, casi se siente como gozó escribiendo esta historia, sobre todo porque cuenta con muchos detalles que me arreisgo a decir, son autobiográficos.
Por sobre todas la cosas, antes de abordar 'La Historia de Lisey', tengan en claro que se aleja mucho de las historias de terror del autor (aunque conserva todo su morbosidad), y mas allá de todo, es un drama con una historia hermosa y sorprendente.
Calificación: Muy buena.
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