Todo comenzó con este pequeño libro, que fue prácticamente ignorado en Argentina al momento de su salida, pero que poco a poco, y a medida que su fama se fue acrecentando, finalmente llegó a mis manos.
Una de las características más particulares de la historia es su sorprendente agilidad para narrar una historia con una base totalmente inspirada en novelas de misterio pero con un transfondo fantástico realmente interesante e intrigante. Básicamente a lo largo de la trama hay un misterio a resolver, y les toca a los personajes descubrirlo por sí mismos, teniendo un sinfín de aventuras para lograr su cometido.
Harry Potter, el personaje principal, no es el típico héroe que se puede encontrar en los libros de cuentos, es un chico huérfano y muy desafortunado (cómo el piensa) que de repente entra en un mundo totalmente desconocido e irracional. En todo momento está lleno de dudas y miedos, que se acrecentan aún mas al verse rodeado de gente desconocida que lo idolatra como una especie de semidiós conocido como "El Elegido", apodo ganado tras sobrevivir a una maldición mágica lanzada por el malvado de turno, Lord Voldemort (algo que nunca nadie había logrado). Los personajes que lo rodean están muy bien caracterizados, algunos en mayor medida que otros, como sus dos mejores amigos, Ronald Weasley (proveniente de una enorme familia mágica) y Hermione Granger (como Harry, proveniente del mundo no mágico). Ellos tres son el eje de esta historia y las demás, haciendo un conjunto verdaderamente admirable. Los personajes adultos también abundan y sirven de guía para los menores que habitan en el castillo de Hogwarts., actuando como profesores.
El detalle más importante y maravilloso del libro, sin embargo, es el mundo mágico que creó la autora. Lugares, situaciones, hechizos, criaturas, nombres, etc, todo este conjunto hace de la lectura un viaje de descubrimiento genial y a la vez te deja ansioso por descubrir más información de este mundo sobrenatural y tan rebosante de magia. Rowling realmente todo el reconocimiento del mundo por haber reinventado el género (o al menos refrescarle la cara) de una manera tan espectacular.
La prosa de J.K. Rowling es simple, concisa, y muy muy entretenida, tanto que el primer libro se puede leer en una tarde de una sola vez (yo hice esto cuando lo leí por primera vez, a los 11 años) y genera una adicción tan grande que la espera a leer el próximo libro es angustiante.
"Harry Potter y la Piedra Filosofal" fue el libro que lo comenzó todo, y es una excelente propuesta para chicos que quieran iniciarse en la literatura juvenil, y también para cualquier adulto que quiera disfrutar de una sencilla y divertida novela fantástica.
Un hito generacional.